Torrelavega ha sido históricamente una localidad de amplia tradición industrial. Desde la primera mitad del siglo XX, grandes empresas han empujado a esta región creando tejido de pequeña y mediana industria, y contribuyendo al crecimiento de otros municipios de la comarca del Besaya, como Cartes, Reocín, Corrales de Buelna, y San Felices de Buelna.
Igualmente, no debemos descuidar la tendencia negativa que ha afectado a la evolución de nuestras empresas durante los últimos años -con una leve recuperación a partir de 2017-, y el profundo proceso de terciarización local que estamos viviendo.
A pesar de que la situación actual no es la idónea, la comarca del Besaya sigue aportando un gran valor a la industria cántabra. Su dinamismo industrial ha sido, y es, clave del desarrollo económico, social y demográfico de nuestra Comunidad.
Sin embargo, la recesión económica experimentada en los últimos 15 años sí que ha tenido una mayor influencia sobre otras áreas, entre las que destaca la demográfica. El número de habitantes se ha conseguido estabilizar, pero nos enfrentamos a un envejecimiento progresivo de la población que está afectando a todos los rincones de nuestro territorio.
Esto, unido a la grave crisis del Coronavirus -la cual ha obligado a miles de empresas a adaptarse para evitar su desaparición-, nos fuerza a establecer una correcta estrategia industrial que garantice la competitividad, la resiliencia y la sostenibilidad de Cantabria en el largo plazo.
Tendencias del sector industrial de Cantabria
El empoderamiento de las PYME para un crecimiento sostenible, y el apoyo al sector industrial para la recuperación de la crisis económica deben ser las dos premisas que definan el horizonte de recuperación y desarrollo industrial. En este sentido, la Unión Europea propone esta serie de temas en su nueva estrategia industrial:
- Centrarse en los aspectos sociales del cambio estructural.
- Revitalizar territorios que dependen de los combustibles fósiles.
- Explotar la economía circular, primando el principio de eficiencia energética.
- Optar por el gas y el hidrógeno para alejarse de los combustibles fósiles.
- Invertir en inteligencia artificial.
- Invertir en I+D.
- Destinar fondos a empresas medioambientalmente sostenibles e intensificar la financiación para empresas en proceso de descarbonización.
La aplicación de todos estos aspectos en la Comunidad de Cantabria será clave para hacer de nuestra región un lugar más competitivo y que pueda luchar de tú a tú en los mercados internacionales. Para ello será importante centrarnos en las oportunidades que nos brinda nuestra región, y a través de las cuales podemos establecer la recuperación económica:
- Nuevo suelo industrial (Las Excavadas, suelo en desuso de Sniace).
- Potencialidad de diversos sectores: agropecuario, agroalimentario e industria siderúrgica.
- Sinergias sectoriales: pesca-turismo y cultura-naturaleza.
- Potencialidades existentes en la valoración de zonas degradadas y otros recursos infrautilizados (fluviales).
- Desarrollo del campus universitario.
- Impulso de los fondos europeos de recuperación.
En CINBESA, a través de nuestro Plan Estratégico (Digitalización, Internacionalización y Financiación), sentaremos las bases del futuro para un crecimiento consolidado en el entorno de la Comarca del Besaya.